La organización rechazó la implementación de la estrategia de desconfinamiento. A su juicio, esta es «éticamente reprochable, constitutiva de un actuar doloso y abiertamente contraria a las recomendaciones de Naciones Unidas y del Sistema Interamericano».


Hace ocho días, el Gobierno dio a conocer su llamado Plan Paso a Paso, que establece etapas para el desconfinamiento en Chile en el marco de la pandemia de coronavirus.

Así, el Ejecutivo planteó cinco etapas progresivas en la medida que se cumplan con ciertos parámetros sanitarios o indicadores epidemiológicos, capacidad de la red asistencial y la trazabilidad. Los pasos o etapas se denominan Cuarentena, Transición, Preparación, Apertura Inicial y Apertura Avanzada.

El anuncio no ha estado exento de críticas principalmente debido al apresuramiento del Gobierno en avanzar hacia un desconfinamiento, pese a que los contagios no han llegado a la tasa recomendada por la OMS. Así, la Comisión Chilena de Derechos Humanos también rechazó la estrategia gubernamental apelando a las resoluciones dictadas por Naciones Unidas en materia de los estándares que deben cumplir los Estados miembros al enfrentar la pandemia de COVID-19.

En el texto difundido por la organización se pone especial atención a lo señalado en las resoluciones en cuanto a  “que las medidas adoptadas por los Estados en la atención y contención de la pandemia, deben tener como centro el pleno respeto de los derechos humanos al mismo tiempo que convocaron a los Estados a no olvidar que los problemas y desafíos, deben ser abordados ‘respetando las obligaciones internacionales”.

Por otra parte, las directrices internacionales señalan que en las actuales circunstancias “los Estados deben adoptar medidas de forma inmediata y de manera diligente para prevenir la ocurrencia de afectaciones al derecho a la salud, la integridad personal y la vida. Tales medidas deben estar enfocadas de manera prioritaria a prevenir los contagios y brindar un tratamiento médico adecuado a las personas que lo requieran”.

Según el análisis realizado por la CCDH, el mencionado Plan de Desconfinamiento que inicia este martes  “desoye las recomendaciones de los organismos internacionales, al carecer de fundamentos médicos y científicos que avalen la decisión del Gobierno y garanticen que el derecho humano y a la Salud está debidamente resguardado. En efecto, la estrategia de desconfinamiento anunciada por el Ministro de Salud, Enrique Paris, mediante la implementación del Plan ‘Paso a Paso’, constituye una inaceptable política de ensayo y error, éticamente reprochable, constitutiva de un actuar doloso y abiertamente contraria a las recomendaciones de Naciones Unidas y del Sistema Interamericano, al exponer la Vida y la Salud de todos los chilenos y chilenas a la posibilidad cierta de un rebrote de la pandemia. Así lo reconoció el propio Ministro de Salud, quien junto con afirmar que está consciente que se pueden producir rebrotes, señaló que si es necesario retroceder, vamos a hacerlo, no descartando una nueva cuarentena”.

En razón de lo anterior, la organización señala que existe un reproche ético y jurídico al mencionado Plan,  ya que éste se funda en la falta de evidencias científicas y médicas que lo justifiquen. “Aunque efectivamente se haya evidenciado una disminución importante en la cantidad de contagios, la baja en la realización de los test, podría estar incidiendo en una interpretación errónea de los datos, correspondiendo a un 10% de la baja tasa de contagio; además, el número de exámenes ha bajado desde un máximo de 21 mil a 3 mil – 4 mil. Los criterios mediante los cuales se adoptan medidas en el Plan ‘Paso a Paso’ dependen del número de exámenes y del número de casos, como el de la tasa de positividad que actualmente se eleva en la Región Metropolitana a un 11%. Por lo tanto, antes de implementar un desconfinamiento, lo que corresponde es aumentar el número de exámenes, a efectos de verificar empíricamente una real baja en la tasa de positividad, que garantice que la pandemia está controlada”, se lee en el texto.

Finalmente, la Comisión hace mención a la falta de transparencia en los datos públicos que sustenten los criterios de las medidas de desconfinamiento, a objeto que el mencionado Plan, dé confianza a la ciudadanía. “Tal como lo ha señalado el Colegio Médico y las sociedades científicas, la estrategia de testeo, trazabilidad y aislamiento (TTA), es la única manera de mantener la epidemia controlada (casos aislados o clusters). Sin embargo el Ministerio de Salud no ha mostrado disposición para acordar junto al Consejo Asesor y las sociedades médicas, la preparación y publicación de un informe de TTA, donde se presenten las métricas relevantes para la evaluación de la estrategia. Si a lo anterior, agregamos la alta tasa de movilidad autorizada (más de un millón de permisos), sumada a la falta de medidas de resguardo ante el inminente uso masivo del transporte público, reconocido por la Ministra del ramo, y la repetición de las fracasadas cuarentenas parciales por comunas, el Plan augura una grave aumento en las tasas de contagios y fallecidos”.

La organización de Derechos Humanos concluye que el mencionado Plan “Paso a Paso” constituye una “nueva versión de la fallida estrategia de Nueva Normalidad y Retorno Seguro, cuyos efectos negativos se tradujeron en miles de contagios y muertes lo que nos obligó institucionalmente a presentar una querella criminal en contra de las autoridades responsables”. Además aseguran que seguirán exigiendo del Estado y sus autoridades el debido cumplimiento de su obligación de respetar y garantizar los derechos humanos de los chilenos y chilenos, especialmente el derecho a la vida y a la salud.

Fuente: Radio Universidad de Chile.

A continuación, comunicado de la CCHDH:


DECLARACIÓN PÚBLICA

En relación al Plan de Desconfinamiento impulsado por el Gobierno, denominado “Paso a Paso”, la Comisión Chilena de Derechos Humanos se hace un deber expresar lo siguiente:

1° En abril pasado, y en consonancia con lo expresado por el Secretario General de Naciones Unidas, Antonio Guterres, los dos órganos de protección que estableció la Convención Americana de Derechos Humanos, dictaron sendas resoluciones dirigidas a los Estados suscriptores de la Convención, entre los que se encuentra Chile, en las que estableció estándares y recomendaciones para enfrentar la pandemia del Covid-19. En efecto, tanto la Comisión como la Corte Interamericana de Derechos Humanos expresaron “que las medidas adoptadas por los Estados en la atención y contención de la pandemia, deben tener como centro el pleno respeto de los derechos humanos” al mismo tiempo que convocaron a los Estados a no olvidar que los problemas y desafíos, deben ser abordados “respetando las obligaciones internacionales”.

Agregaron que “ante las circunstancias actuales de la pandemia del COVID-19, los Estados deben adoptar medidas de forma inmediata y de manera diligente para prevenir la ocurrencia de afectaciones al derecho a la salud, la integridad personal y la vida. Tales medidas deben estar enfocadas de manera prioritaria a prevenir los contagios y brindar un tratamiento médico adecuado a las personas que lo requieran.”

2° Sin embargo, del análisis del mencionado Plan de Desconfinamiento, cuya implementación comienza mañana, 28 de Julio, se advierte que su contenido desoye las recomendaciones de los organismos internacionales, al carecer de fundamentos médicos y científicos que avalen la decisión del Gobierno y garanticen que el derecho humano y a la Salud está debidamente resguardado.

En efecto, la estrategia de desconfinamiento anunciada por el Ministro de Salud, Enrique Paris, mediante la implementación del Plan “Paso a Paso”, constituye una inaceptable política de ensayo y error, éticamente reprochable, constitutiva de un actuar doloso y abiertamente contraria a las recomendaciones de Naciones Unidas y del Sistema Interamericano, al exponer la Vida y la Salud de todos los chilenos y chilenas a la posibilidad cierta de un rebrote de la pandemia.

Así lo reconoció el propio Ministro de Salud, quien junto con afirmar que está consciente que se pueden producir rebrotes, señaló que “si es necesario retroceder, vamos a hacerlo”, no descartando una nueva cuarentena.

3° El reproche ético y jurídico al mencionado Plan, se funda además, en la falta de evidencias científicas y médicas que justifiquen dicho Plan. En efecto, aunque efectivamente se haya evidenciado una disminución importante en la cantidad de contagios, la baja en la realización de los test, podría estar incidiendo en una interpretación errónea de los datos, correspondiendo a un 10% de la baja tasa de contagio; además, el número de exámenes ha bajado desde un máximo de 21 mil a 3 mil – 4 mil.

Los criterios mediante los cuales se adoptan medidas en el Plan “Paso a Paso”, dependen del número de exámenes y del número de casos, como el de la tasa de positividad que actualmente se eleva en la Región Metropolitana a un 11%.
Por lo tanto, antes de implementar un desconfinamiento, lo que corresponde es aumentar el número de exámenes, a efectos de verificar empíricamente una real baja en la tasa de positividad, que garantice que la pandemia está controlada.

4° Asimismo, existe falta de transparencia en los datos públicos que sustenten los criterios de las medidas de desconfinamiento, a objeto que el mencionado Plan, dé confianza a la ciudadanía.

En efecto, tal como lo ha señalado el Colegio Médico y las sociedades científicas, la estrategia de testeo, trazabilidad y aislamiento (TTA), es la única manera de mantener la epidemia controlada (casos aislados o clusters). Sin embargo, el Ministerio de Salud no ha mostrado disposición para acordar junto al Consejo Asesor y las sociedades médicas, la preparación y publicación de un informe de TTA, donde se presenten las métricas relevantes para la evaluación de la estrategia.

Si a lo anterior, agregamos la alta tasa de movilidad autorizada (más de un millón de permisos), sumada a la falta de medidas de resguardo ante el inminente uso masivo del transporte público, reconocido por la Ministra del ramo, y la repetición de las fracasadas cuarentenas parciales por comunas, el Plan augura una grave aumento en las tasas de contagios y fallecidos.

5° En definitiva, el mencionado Plan “Paso a Paso” más bien parece una nueva versión de la fallida estrategia de Nueva Normalidad y Retorno Seguro, cuyos efectos negativos se tradujeron en miles de contagios y muertes, lo que nos obligó institucionalmente a presentar una querella criminal en contra de las autoridades responsables.

6° La Comisión Chilena de Derechos Humanos, fiel a sus propósitos institucionales, seguirá exigiendo del Estado y sus autoridades, el debido cumplimiento de su obligación de respetar y garantizar los derechos humanos de los chilenos y chilenos, especialmente el derecho a la vida y a la salud en la hora presente, y seguirá denunciando ante los tribunales nacionales e instancias internacionales, todo desconocimiento de las obligaciones contraídas por la suscripción y ratificación de los Pactos y Convenciones de Derechos Humanos.

COMISION CHILENA DE DERECHOS HUMANOS
Santiago, 27 de Julio de 2020.-